Se trata de un espacio verde de 43.700 metros cuadrados en el que se encuentra el Acueducto, la Noria y el Museo de la Huerta, declarados Zona de Interés Cultural, por el gran valor patrimonial de sus elementos arquitectónicos.
El entorno cuenta, además, con un auditorio de reciente construcción para celebrar conciertos y obras de teatro al aire libre, con capacidad para 500 personas, una zona de juegos infantiles de 1.000 metros cuadrados en forma de castillo medieval, con una torre de seis metros de altura, un skate park y un área de entrenamientos de calistenia.
Completan el conjunto el yacimiento romano de los siglos I y III d.C. y la Acequia del Turbedal, considerada Bien de Interés Cultural, rodeados de jardines, parterres, alumbrado, bancos y zonas de descanso.
Deja una respuesta